El Departamento Administrativo de Sostenibilidad Ambiental Dadsa llevó a cabo un operativo de vigilancia y control en diversos establecimientos comerciales ubicados en el Centro Histórico de la ciudad, con el fin de verificar que se esté cumpliendo con los límites de decibeles permitidos por la normativa vigente, garantizando así la convivencia armónica entre los comerciantes, residentes y visitantes. El operativo se centró en establecimientos de ocio y entretenimiento, como bares, discotecas y restaurantes, que suelen generar niveles de ruido que pueden afectar el entorno. El objetivo principal fue prevenir situaciones de contaminación acústica que puedan alterar la paz y tranquilidad en el área, una problemática que ha sido de creciente preocupación para las autoridades locales. La campaña también contó con la colaboración de la Secretaría de Desarrollo Económico, que se ha sumado al esfuerzo para apoyar la recuperación del sector comercial en el Centro Histórico, en busca de sensibilizar a los propietarios de los negocios sobre la importancia de respetar los límites de ruido, así como promover la responsabilidad ambiental en sus operaciones diarias.