Los planes para construir las que serían las últimas centrales de producción de energía a partir de carbón en América Latina fueron cancelados. Así lo afirma el último informe, publicado ayer, del Global Coal Plant Tracker, lo que implica que, para 2040, casi todos los países de la región habrán eliminado el carbón de sus matrices de generación eléctrica, incluido Colombia.

La noticia se confirmó hoy, luego de que Honduras anunciara su adhesión a la Powering Past Coal Alliance (PPCA), una coalición de organizaciones y gobiernos que promueven la transición energética para abandonar el carbón. La Central Térmica Puente Alto, que planeaba generar 0,1 gigavatios (GW) de energía, no había presentado avances desde 2022, que se conocieron los planes para construirla.

Con esta adhesión, Honduras asume el camino de países como Colombia, que ya no cuentan con ningún plan para construir centrales térmicas a base de carbón. En cambio, su objetivo es producir energía a partir de fuentes renovables para mitigar la huella de carbono y alinearse con los objetivos del Acuerdo de París, que busca limitar el aumento de temperatura global a 1,5 °C.

Hace poco más de un mes, el proyecto brasileño Usina Termelétrica Ouro Negro, cuya solicitud de licencia para operar fue rechazada en agosto de 2023 y no ha vuelto a ser presentada, se declaró “suspendido” por el Global Energy Monitor (GEM), misma organización que elaboró el informe publicado ayer.

De acuerdo con esta organización, se trataba de una central de 0,6 GW de energía y la autoridad ambiental de Brasil “rechazó su Programa de Gestión de Riesgos y su Plan de Respuesta a Emergencias”. Estas dos, en Brasil y Honduras, eran las últimas centrales de carbón propuestas en la región.

En los últimos 10 años, reporta el GEM, hemos pasado de 18 plantas térmicas de carbón planeadas por los países de América Latina, a cero. Esto “marca una caída más amplia en el desarrollo de la generación eléctrica a base de carbón en la región. Ninguna propuesta de planta de carbón ha avanzado en el proceso de permisos desde 2019, ni se ha iniciado ninguna nueva construcción desde 2016″, explican en el informe.

La única central que sigue en construcción se encuentra en Argentina y sus obras han avanzado poco en los últimos nueve años debido a “problemas técnicos, sobrecostos y denuncias de corrupción”, dice el documento.

El objetivo trazado en el Acuerdo de París es apagar los 16,3 GW de energía que se producen con carbón en América Latina antes de 2040. El 60 % de esa capacidad ya estableció una ruta para lograrlo antes de ese año y Colombia hace parte de los países que espera hacerlo en los próximos años.

¿Cuándo se apagarán las térmicas en Colombia?

Aunque no hay una fecha clara en la que Colombia dejará de producir electricidad a partir de carbón, los escenarios del Plan Energético Nacional plantean una reducción significativa entre 2030 y 2040, cumpliendo el límite planteado en el Acuerdo de París.

De hecho, en 2023, el actual Gobierno anunció que Termoguajira sería la primera central térmica de carbón en transitar hacia energías renovables. Esta central es pública y tiene una capacidad de 0,3 GW. Irene Vélez, primera ministra de Minas y Energía de la presidencia de Gustavo Petro, dijo que para finales de 2023 se publicarían los planes para que esta empresa abandone el carbón.

Sin embargo, la publicación de ese documento se ha retrasado. Andrés Camacho, segundo ministro de esa cartera que dejó el cargo en marzo de 2025, dijo a El Espectador pocos días antes de su salida que durante los próximos meses debía publicarse un borrador de esos planes.

La cuestión es que Colombia cuenta con las centrales térmicas como respaldo para la generación de energía en situaciones como la ocurrida en 2024, cuando la sequía disminuyó el nivel de los embalses y, como consecuencia, la generación de energía hidroeléctrica, que suele aportar el 70 % de la demanda del país.

El Gobierno ha insistido en que las energías renovables, como la solar y la eólica, serán el remplazo de ese respaldo. Sin embargo, como hemos contado en artículos como este, la energía eólica presenta importantes retrasos frente a los planes que se tenían durante esta década. Por sus características, el viento es un mejor respaldo que el sol, pues este tiene horas pico de producción, mientras que la energía eólica es más estable.

Aun así, el informe del GEM cuenta a Colombia como parte de los países que ya tienen un plan trazado para apagar sus térmicas de carbón antes de 2040. Mientras tanto, otros tres países de la región todavía no tienen claro si cumplirán el objetivo del Acuerdo de París.

Las térmicas que seguirían operando después de 2040 en América Latina

El informe del GEM destaca que 10 GW de energía térmica de carbón, suficiente para abastecer a media Colombia, se apagará para 2040. Sin embargo, todavía no es claro qué pasará con los 6 GW restantes.